Con esta gestión se cumplió el objetivo previsto para la primera etapa del plan. Con una inversión de 320 mil pesos, la iniciativa incluyó: la realización de un examen médico con audiometría y otros estudios fonoaudiológicos para determinar el tipo de audífono adecuado al grado de hipoacúsia.

Según datos suministrados por el INDEC en el año 2004, la hipoacúsia es un problema que afecta al 12,2 por ciento de la población argentina.

Si bien, las personas hipoacúsicas pueden desenvolverse y con la ayuda de la tecnología correspondiente alcanzar una integración total, es necesaria la estimulación y el equipamiento temprano desde la infancia.

En las etapas posteriores, el programa prevé el equipamiento de los alumnos que ingresen en el ciclo escolar; y para aquellos equipados por el Programa en años anteriores se les otorgará los estudios fonoaudiológicos, el mantenimiento del audífono, nueva prótesis si fuera necesario y la provisión de pilas por el término de un año.