"Le pido a la oposición que vote esta ley que ayuda a salvar vidas", afirmó Macri en un acto que realizó junto al rabino Sergio Bergman, primer candidato a diputado en la ciudad,  en la esquina de Luis María Campos y General Matienzo. 

La fundación Argentina Ciudadana, que lidera Bergman, consiguió recolectar las 37 mil firmas necesarias para convertir el proyecto en una Iniciativa Popular, con la obligación de que adquiera estado parlamentario, después de que la oposición lo rechazara el año pasado.  "Se lo pedimos a (Daniel) Filmus, a (Fernando) Solanas y a todos los candidatos que se opusieron el año pasado a que este proyecto tuviese un alcance más amplio y que en su lugar lograron desvirtuar el espíritu de la Ley", señaló Macri.

Además de Bergman, acompañaron a Macri Cristian Ritondo y Martín Ocampo, candidatos del PRO a la Legislatura, y el ministro de Justicia y Seguridad, Guillermo Montenegro.

“Estamos sufriendo un promedio de 20 delitos de este tipo por día y hace falta una respuesta rápida. Son cuestiones en las que están en juego la tranquilidad y la vida de la gente”, afirmó Ridondo.

La norma sancionada por la Legislatura "impide" la circulación de dos personas en motocicletas en el área delimitada por Córdoba, Carlos Pellegrini, Rivadavia y Leandro N. Alem, los días hábiles entre las 10 y las 16, mientras que el proyecto PRO pretendía un área más amplia de restricción y que la prohibición se extendiera, al menos, a 10 avenidas más de la Ciudad.

La particularidad de esta ley es que no impone  sanciones o multas a los motoqueros que no cumplan con la normativa y si lo hacen a las estaciones de servicio que provean de combustible a los conductores que no posean el casco y cuyos rodados no tengan la matrícula correspondiente.

El proyecto reflotado por el macrismo fija sanciones y demanda que en el resto de la Ciudad, incluso en los horarios permitidos, los acompañantes de los motociclistas deban viajar con un chaleco de identificación en el que figure la patente de la unidad.