Daniel Rubino y Alejandro Riedel son alumnos del último año de la escuela técnica Ingeniero Luis Huergo y los creadores de una cama ortopédica robotizada para enfermos que les permitió obtener el primer premio en la Feria Nacional de Ciencia. En un acto donde presentaron su invento frente a todos los chicos que asisten al Huergo,  aseguraron que volcarán su idea al sector público y a las personas de escasos recursos.

“Aunque ya vendimos dos camas en forma privada, por ser alumnos de una escuela pública y vamos a volcar nuestro invento a hospitales y a otros sectores de la ciudad, para retribuirle a la sociedad lo que invirtieron en nosotros, para la personas de bajos recursos”, aseguraron los estudiantes.

La cama ortopédica robotizada funciona con la voz humana, pero para personas con afasia, reconoce sonidos, gritos, soplidos y hasta el aliento para levantar y bajar el respaldo, las piernas y cubrir una rutina de ejercicios para que el paciente no esté inmóvil.

Daniel recordó que la idea surgió cuando su abuelo estaba internado. “Observé que los pacientes del hospital no podían levantarse para encender la televisión, la luz o moverse dentro de la cama”.

Los chicos quieren avanzar en su proyecto y planean poder “ponerle otras funciones a la cama para que la persona pueda controlar los dispositivos electrónicos de la habitación”.
Los alumnos también recordaron que la iniciativa partió de las ganas de “devolverle algo a la sociedad” y que por lo tanto “volveríamos a hacerlo sin pensarlo”.

El exitoso trabajo nació cuando el año pasado los chicos del Huergo ganaron el Premio Konex y obtuvieron 2.500 pesos. Con ese dinero pusieron manos a la obra para construir la maqueta y luego la cama real.  Con el invento ganaron la Feria de Ciencias de la Ciudad de Buenos Aires y hace unos días volvieron a obtener el primer premio en la instancia nacional en la provincia de Misiones. En marzo del año próximo los espera la etapa internacional en el estado norteamericano de Oregon.

En cuanto a sus detalles técnicos, el invento consiste en automatizar una cama ortopédica, que se puede manejar mediante un sistema electrónico de control a través de un mecanismo robotizado. La persona que utilice la cama podrá controlarla mediante un panel digital y también mediante su voz. Un PLC (Controlador Lógico Programable) permite grabar registros de posiciones, y tres motorreductores realizan el movimiento.    Además, el PLC permite monitorear el estado del paciente por medio de sensores de presión y temperatura, y visualizarlos en el lugar o a través de una red en cualquier otro sitio utilizando una PC.