La convocatoria fue realizada por el Frente de Renovación Gremial de la Asociación de Médicos Municipales, la Asociación de Bioquímicos, de Psicólogos y diversas asociaciones de profesionales agrupadas en la Mesa Multisectorial de Salud porteña, informaron esos sindicatos.

Los profesionales reclaman por el desfinanciamiento de "nombramientos para cubrir vacantes concursadas, que está provocando la paralización de numerosos servicios y la reducción de las suplencias de guardia que ya están afectando a los servicios de urgencia".   Jorge Pachamé, del Frente de Renovación Gremial, denunció que  "el desfinanciamiento de 1500 cargos concursados y la reducción del 40% de las suplencias de guardia genera que los residentes estén sometidos a jornadas extenuantes".

"Esto provoca una reducción de los puestos por especialidad, y no cumplimiento del descanso pos guardia ni del derecho a los días por stress", precisó el sindicalista. 

La crisis del sector también se evidencia en "los profesionales que ingresan por concurso y que trabajan gratis, las enfermeras sobrecargadas de trabajo y con salarios básicos de 1800 pesos", remarcó.

El otro eje de  la protesta es la rebaja de salarios que, desde junio, afecta a 15.000 profesionales, con descuentos de entre 1000 y 2500 pesos  "lo que barre con la paritaria 2013, y retrotrae los sueldos a los de agosto de 2012", puntualizaron.   Al respecto,  Pachamé explicó que no hubo ningún acto administrativo en el que el gobierno de Mauricio Macri explicara el supuesto error por el que se liquidó de más nueve meses seguidos que ahora  les están descontando.  “El Gobierno de la Ciudad no presentó una resolución informando del error. No hay acto administrativo ni nota explicativa. No presentaron el error. Es un atropello a los derechos laborales.

La gente está muy enojada, no acepta esto. Es una política de ajuste y empezaron con los profesionales porque son los menos reaccionarios, pero no previeron las consecuencias”, sostuvo el sindicalista.

Entre los problemas que Pachamé enumeró, se encuentran los magros salarios de los enfermeros, el estado del Hospital Álvarez –que no fue reconstruido tras un incendio el año pasado–, la reducción de camas y salas de internación en general y la demora de la puesta en marcha del Servicio de Neurocirugía del Hospital Santa Lucía, que sigue cerrado.

Además, el médico puso especial énfasis en la situación del hospital psiquiátrico Borda y denunció una supuesta transferencia de pacientes a clínicas privadas. “Hay un incumplimiento de la Ley de Salud Mental, ya que no hay casas de medio camino para la progresiva externación de los pacientes. Hoy hay 640 pacientes en el hospital, un 40 por ciento menos que hace cinco años, pero esto no es un efecto de la aplicación de la ley, sino que trasladaron pacientes a hospitales privados de provincia. Están haciendo negocios a partir de la enfermedad. En lugar de invertir en hospitales públicos, invierten en clínicas privadas. Están privatizando la salud.”

Fuente: Página 12