La audiencia será acompañada por familiares de víctimas de gatillo fácil y organismos de Derechos Humanos, que realizarán una radio abierta y actividades culturales en la puerta de Tribunales, en Talcahuano 550, a partir de las 9.
Luego de casi cuatro años de lucha y dos postergaciones en febrero y abril, el policía Ayala llega al juicio en libertad y separado de sus funciones pero no exonerado de la fuerza.
El 9 de noviembre de 2015, Lucas Cabello, un joven vecino del barrio de La Boca, fue atacado en la puerta de su casa frente a su hija de 2 años y su mujer por el efectivo de la ex Policía Metropolitana, Ricardo Ayala. El brutal accionar del agente, que disparó tres veces a quemarropa, le dejó heridas gravísimas a Lucas quien se recupera en silla de ruedas.
Ayala, que tenía sólo 6 meses de instrucción, argumentó que actuó porque Cabello “estaba armado”, pero los peritajes balísticos demostraron que las tres vainas halladas en la escena eran del arma policial , la única que fue encontrada. “La única arma que tenía Lucas era un sándwich de milanesa que le había comprado a su hija”, afirmó Gabriela Carpineti, una de las abogadas del joven.
Luego del ataque, la entonces vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal , defendió a Ayala. “Se trató de una cuestión de género. El policía protegía a la mujer que apretó el botón antipánico”, justificó. Esta versión fue desmentida por la novia de Cabello y otros testigos.
“Una de las primeras que instala esta doctrina (Chocobar) es Vidal con este hecho”, sostuvo Carpineti. Según la abogada, apenas sucedió este hecho, la actual gobernadora bonaerense, Macri y Guillermo Montenegro -que en 2015 era ministro de Justicia y Seguridad porteño y hoy diputado bonaerense y candidato a intendente de Mar del Plata- “salieron a justificar el accionar de Ayala”.
“Lucas tardó 3 años en superar la cuadriplejia. Hoy es hemipléjico y puede mover los brazos -contó Carpineti-. Tardó menos tiempo en poder volver a mover sus brazos que en que se haga el juicio. Eso habla de la voluntad de Lucas para seguir adelante. Hoy es sobreviviente y querellante de su propio juicio. Eso es muy importante”.
Fuente: Página 12