Aníbal Ibarra y Jaim Etcheverry sellaron el martes pasado un convenio de cooperación con el fin de integrar a 400 arquitectos e ingenieros y a 200 pasantes universitarios a un Programa de Certificación de Calidad Edilicia de los establecimientos educativos que dependen de la Secretaría de Educación porteña.

El objetivo del programa es el relevamiento de los 674 establecimientos educativos que conforman el parque edilicio de la Ciudad, para determinar su estado.

Los profesionales se dividirán en equipos de trabajo (diez por cada distrito escolar) y deberán entregar un diagnóstico acerca del estado de las escuelas en un plazo de entre 60 y 90 días.

El convenio, que llega luego de numerosas protestas estudiantiles en la Ciudad debido a las deficiencias en las infraestructuras, establece que los técnicos certificarán que los edificios reúnan las condiciones de seguridad e higiene establecidas.

En una primera etapa, el Gobierno de la Ciudad deberá transferir 1.260.000 pesos a la UBA para realizar las tareas. Asimismo, la Secretaría de Educación porteña asumió el compromiso público de implementar los arreglos recomendados antes del comienzo del ciclo lectivo 2006.

Actualmente, un tercio de los establecimientos se encuentran en obras, con una inversión total de más de 75 millones de pesos. Y en las últimas semanas Ibarra anunció planes para acelerar los trabajos.