Con en el objetivo de prevenir enfermedades y proteger la salud de usuarios y profesionales en el marco de una práctica cada vez más popular.

La Secretaría de Salud, dictará cursos de capacitación obligatorios para los profesionales del rubro, sobre normas sanitarias, esterilización, higiene, bioseguridad y primeros Auxilios, entre otros temas pertinentes.

Además será el organismo encargado de otorgar las licencias para que tatuadotes y perforadores puedan ejercer su tarea.

Las licencias serán revalidadas cada dos años, siempre y cuando, no se haya infringido ninguna de las disposiciones que establece la norma.

Para obtener este permiso, los tatuadotes, deberán presentar la libreta sanitaria expedida por hospitales porteños, el calendario de vacunación al día y los certificados de capacitación.

Entre las disposiciones más relevantes, se encuentra la prohibición de efectuar tatuajes o perforaciones a menores de 18 sin autorización escrita y acreditada de padre o tutor.

También la prohibición incluye a personas alcoholizadas o bajo el efecto visible de sustancias tóxicas.

Se deberá solicitar la vacunación antitetánica previa y se informará al cliente los cuidados que debe suministrarse en la zona afectada por la práctica.

El incumplimiento de la norma podrá ser sancionado con multas que van desde los $50 hasta los $2000, incluyendo según la gravedad de la falta la clausura del local y la inhabilitación temporaria o permanente de la licencia para ejercer la actividad.